Al gobierno conservador británico no lo conmovió que Javier Milei sea el primer presidente electo argentino que se declara admirador de Margaret Thatcher, la “gran líder”, que su reino conoció como la “Dama de Hierro”. Rishi Sunak, el primer ministro de origen indio y economista como el libertario, rechazó su llamado para dialogar sobre la soberaría de las Malvinas.
“Asunto resuelto”, dijo el primer ministro británico luego que Milei le instara a negociar sobre la soberanía, que llevó a ambos países a la guerra en el 1982.
Milei, de 53 años, dijo que consideraba a Thatcher como una de las “grandes líderes” de la humanidad . Añadió que la fallecida primera ministra “tuvo un papel importante en la caída del Muro de Berlín, lo que parece molestarles, y que aplastó a la izquierda”.
Si bien los elogios de Milei sorprendieron a los británicos, no bastaron para conmover al gabinete Tory. Un gobierno que está debilitado por el fracaso de su política migratoria hacia Ruanda, un Brexit que ha resultado un fracaso y con una elección general próxima, que pueden perder frente a los laboristas.
Algunos Torys hasta pensaron que las islas en el Atlántico Sur podría ser un destino para los aspirantes al asilo no queridos en Gran Bretaña, luego que la Corte Suprema de Justicia declarara a Ruanda como” ilegal por no ser un lugar seguro”.
El portavoz del primer ministro dijo que la propiedad británica del archipiélago en el Atlántico Sur se había “resuelto decisivamente hace algún tiempo”.